Introducción

La comunidad académica que compone el Programa de Cine y Audiovisuales de la Universidad del Magdalena celebra 10 años de existencia y en este marco se realiza el evento Cuatro miradas en el cine colombiano – Marta Rodríguez, Lisandro Duque, Víctor Gaviria y Mauricio García-.

La obra fílmica de Marta Rodríguez (n. 1 de diciembre de 1933) marcó un hito en la historia del cine, logró  conquistar un valioso testimonio audiovisual de la realidad de Colombia y consolidó un cine basado en la representación directa, empleando el arte como un medio de transformación social.  Nació en la ciudad de Bogotá y creció en los campos de la Sabana lo que le permitirían experimentar la vida campesina y conocer profundamente un país que después retrataría. Su juventud seducida por el cine mundial y los movimientos sociales, le llevaron  a ser una estudiosa incansable y a convertirse en discípulo  del  celebre  antropólogo, maestro del cine etnográfico, Jean Rouche. Una joven cuyo espíritu inquieto abrazaría más de cincuenta años de historia nacional a través de la cámara.

El cine colombiano nace en los años 20, lo que implica 46 años de espera para que nombres de mujeres se registraran en los créditos de dirección de obras cinematográficas, de la mano de un género alternativo por su esencia misma, como es el documental. Género modesto que por primera vez, de la mano de Chircales (1971), colocó la cinematografía colombiana en el escenario mundial.

Fue una de las primeras mujeres colombianas en hacer cine documental, su trabajo cinematográfico inició en tiempos donde la mujer debía cumplir su rol de ama de casa y permanecer al margen de la situación del país. Con el mismo ahínco de su juventud, Martha Rodríguez continua hoy trabajando en defensa del rescate de la memoria cultural de los grupos minoritarios: indígenas, campesinos, desplazados, hacedoras de ladrillos, las que renacieron de las cenizas de Armero y se salvaron de las masacres, las voces sin voz y las de las casas vencidas, continua aleccionando nuestros corazones y nuestra conciencia colectiva, porque como ella misma expresa, “la resistencia se exorciza con cantos“.

 

El aporte literario y de creación cinematográfica que le ha hecho Lisandro Duque (n. 30 de octubre de 1943) al patrimonio fílmico colombiano y los diversos premios y distinciones que le han sido otorgados con plenos merecimientos, aunados a sus altas calidades humanas y amor por las historias cotidianas que reflejen la situación del país, lo sitúan como ejemplo para la formación ética, cultural, creativa e innovadora de los realizadores audiovisuales de este país.

Las nuevas generaciones de realizadores lo han hecho merecedor del Premio a la mejor película colombiana de los últimos tres años (2001 a 2003) por elección de los estudiantes de cine, televisión y comunicaciones de 30 universidades de Colombia,  a su largometraje Los niños Invisibles. Su vasta obra cinematográfica  cuenta con más de 28 trabajos audiovisuales entre largometrajes, cortometrajes y series de televisión, sin contar 17 trabajos como guionista.

Los logros obtenidos por el director de cine, guionista, poeta y escritor colombiano Víctor Gaviria (n. 19 de enero de 1955) en el ámbito de la cultura, en especial por medio de su notable y reconocido aporte al desarrollo de la cinematografía colombiana y las artes, se han convertido en fuente de inspiración por parte de las nuevas generaciones de niños, niñas y jóvenes de nuestro departamento y el país. En su obra Gaviria es reconocido por reflejar la realidad social de Colombia y por extensión de Latinoamérica y del mundo.

Sus tres largometrajes: Rodrigo D, no futuro (1990), La Vendedora de Rosas (1998) y Sumas y Restas (2005) han ganado numerosos premios internacionales e incluso dos de ellos fueron parte de la selección oficial del Festival de Cannes. 

“Hay muchas clases de reinos. Entre los más pobres hay algunos que superan a los demás en pobreza, llevan con una alegría inusual su saco y su sombrero agujereados, su espíritu a prueba de todo resplandece con el simple paso del tiempo…”

Este fragmento del poema La novia que no duerme de Víctor Gaviria resume lo que es el cine para él, un cine que llego sin pedir permiso, cuando él solo quería ser escritor. En medio del desplome del frente nacional, de los inicios de los grandes carteles del narcotráfico en Medellín y de las protestas de estudiantes, campesinos y obreros nace el cine onírico y realista de Víctor Gaviria, influenciado por el neorrealismo italiano de la posguerra mundial, quien ve en el cine otra forma de conocer y comunicar la realidad de un doble país, de un lado la opulencia y de otro la exclusión absoluta. 

Los logros obtenidos por Mauricio García (n. 6 de julio de 1959)  en el quehacer audiovisual en el género de la animación han sido muy importante para el fortalecimiento de este género en Colombia, lo que lo convierte hoy en día en pionero de la animación y uno de sus  grandes exponentes, conocimiento y experiencia que imparte a los nuevos realizadores que se forman en nuestra ciudad, departamento, región y el resto del país.

Entre sus trabajos más importantes se destaca El Pasajero de la Noche (1985/88),  en codirección con Carlos Santa, una película a Color en 35mm, con una duración de 25 minutos que entre dibujos sobre papel, acetatos, fotocopias y un poco de ensamblaje ha marcado un precedente en la animación en Colombia.

Entre sus otras realizaciones se destacan Imagen en Movimiento (1996), dirección, guion y animación de un documental sobre las diferentes técnicas de animación y Andares en tiempo de Guerra (1997/98), guión y animación de un cortometraje de 5 minutos producido por Channel 4. También realizó Lee & Marvin  una serie de cartoons para internet y desarrolló una serie de Video-games para el público infantil con un estudio de animación en Milano.

Hoy en día ha involucrado a estudiantes y egresados del Programa de Cine y Audiovisuales de la Universidad del Magdalena en un importante proyecto audiovisual animado que se está desarrollando en la Ciudad de Santa Marta como lo es Todo es Posible proyecto que narra la historia de un niño de nueve años que conquista el mundo a través de la imaginación, este proyecto se basa en la obra de Rafael Pombo y partiendo de peripecias y personajes de sus fabulas, una historia de fantásticas aventuras que recobra los valores de este gran poeta colombiano quien este año cumplió 100 años de nacimiento.

Es para nosotros un orgullo realizar un dialogo entre estos cuatro exponentes del cine colombiano y la comunidad académica de la Universidad del Magdalena y agradecemos inmensamente que acepten la asignación de honoris causa realizada por el honorable Consejo Académico, porque con este gesto de parte de los realizadores, construimos hechos que permiten a la Universidad reconocer aquellas personas que encarnan el saber, que no es más que experiencia racionalizada y que lo han colocado desprevenidamente al servicio de todas y todos.

Carlos Mario Bernal Acevedo

Director del Programa de Cine y Audio